Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido

Actualidad

Actualidad

Colegio privado reclama asistencia para su funcionamiento

El Colegio Domingo Faustino Sarmiento y el Jardín Monigote funcionan hace 13 años en la ciudad sin ningún tipo de apoyo estatal ni exención impositiva por parte de la comuna.
Horacio Beascochea
Por Horacio Beascochea

Fundado en el año 1998, el Colegio Domingo Faustino Sarmiento y el Jardín Monigote, brindan un servicio educativo de excelencia a lo que la educación privada se refiere.
Este establecimiento fundado hace 13 años no recibe aporte alguno del estado provincial ni exención impositiva por parte de la comuna.

“En un primer momento comenzamos como jardín de infantes y a partir del año 2005, pasamos a ser extensión de primaria, a partir del 2010 abarcamos hasta séptimo grado y la idea es seguir avanzando para conseguir un secundario”, cuenta la coordinadora general de este proyecto, Beatriz Oyola.

En la actualidad, el colegio tiene una matrícula de 200 alumnos, de los cuales cerca de 80 asisten al Jardín de Infantes y el resto se divide entre los diferentes grados.
En el caso del Jardín de Infantes, las clases se dictan tanto de mañana como de tarde y el resto de la primaria, asisten de 8 a 13 horas, con talleres extraescolares optativos como inglés, taekwondo o folclore, por citar algunos.

En cuanto al valor de las cuotas, los precios varían. En el caso del Jardín para chicos de 5 años, tiene un costo mensual de $ 450, pero hay chicos becados al cien por ciento, al cincuenta y otros becados con papás que hacen contraprestaciones.

En el caso de los alumnos de la escuela primaria, el valor de la cuota ronda en alrededor de 560 pesos mensuales, que se abonan desde febrero hasta diciembre.

Cabe destacar que, desde su fundación, esta institución privada no recibe ningún tipo de aporte por parte del Estado, como sí ocurre con otras instituciones privadas en Plottier.

“En febrero de este año parecía que nos iban a otorgar algún tipo de ayuda para los primeros grados, ya que contamos con chicos integrados, pero hasta ahora no hemos tenido respuestas favorables”.

Al referirse a chicos integrados, Beatriz destaca que en primero, segundo y tercer grado, su institución alberga a chicos con capacidades diferentes y con algún tipo de retraso madurativo.

Oyola asegura que ya han enviado un sinnúmero de notas al Consejo de Educación para intentar conseguir algún tipo de subsidio o asistencia y hasta ahora no han obtenido respuestas favorables.

“Estábamos esperando que terminara este conflicto educativo para volver a insistir nuevamente”, agrega. “Para nosotros sería muy bueno contar con alguna colaboración, sobre todo pensando que la oferta educativa en Plottier es escasa y que este proyecto nació desde un primer momento como un establecimiento educativo”, sostiene.

“Además, si los chicos asisten a la escuela en la ciudad, se evita el desarraigo y los inconvenientes que significa trasladarse a otras localidades como Neuquén. Somos una alternativa más que válida para que los chicos tengan sus amigos acá y no tengan que trasladarse hasta la capital”, haciendo referencia a la educación privada.

Oyola dice que hace trece años que está golpeando puertas para conseguir algún tipo de subsidio ya sea provincial o municipal. “Incluso el intendente se había comprometido a conseguirnos una exención de impuestos, pero hasta ahora no ha ocurrido nada, pese a que le hemos enviado tres notas”.

Desde el Consejo de Educación, en cambio, la directora de Educación Privada, Andrea Lambert, manifestó que “no se han entregado nuevos subsidios a escuelas privadas por falta de presupuesto desde el año 2009”.

En el caso puntual del colegio y el jardín, si bien reconocen que tienen aprobados los requisitos para formar parte de la enseñanza oficial hace tiempo, así como que cuentan con un edificio apropiado, no cumplen con ciertos aspectos.

Lambert asegura que se otorgan subsidios cuando existe la necesidad concreta de falta de bancas. Para el caso del jardín, este punto aparentemente estaría cumplimentado porque no existirían 80 plazas libres en los jardines de infantes de Plottier.

Sin embargo, en el caso del colegio, no cuentan con la cantidad de chicos por grado, que deberían ser unos 25. También tendría que existir la necesidad, y hoy, en Plottier, sobran bancas para la escuela primaria.

Cabe destacar que ésta no es la única escuela privada en Plottier, ya que existe la Escuela Cristiana Creciendo, dónde, por un cuarto del valor de la cuota mensual del colegio Sarmiento, se brinda un servicio educativo.

En este sentido, la directora de Educación Privada, señala que la escuela Creciendo sí recibe aportes del Estado y que no hacen ninguna diferencia entre escuelas laicas y religiosas.

Lo cierto es que el colegio Sarmiento y su jardín no reciben aportes estatales, contrariamente a la escuela Creciendo que sí los recibe. La municipalidad se había comprometido a exceptuarlos impositivamente, pero hasta el día de hoy, no ha ocurrido.

Compartinos tu opinión

Te puede interesar

Teclas de acceso