Durante el pasado fin de semana se desactiváron una serie de dispositivos conocidos como “pescadores” que se encontrában instalados en el cajero ubicado sobre calle Chos Malal, luego de que a un usuario se le retuviera la tarjeta de crédito e inmediatamente luego de lo sucedido se acercara otra persona a ofrecerle su ayuda.

Tras lo sucedido, el hombre desistió de la ayuda ofrecida por el extraño y rápidamente dió aviso a la policía. Pese a ello, unas horas después el gerente del banco detectó otro aparato de este tipo y fue desactivado.

Esta nueva modalidad delictiva ya es conocida por el personal de los bancos, ya que en oportunidades anteriores habían advertido a los vecinos para que tomen los recaudos correspondientes y eviten que sus sueldos sean robados.

Los encargados de instalar estos aparatos para quedarse con el dinero de los ciudadanos actuán generalmente los fines de semana, ya que los usuarios no pueden obtener ayuda de los empleados bancarios y se ven obligados a aceptarla de parte de quienes más tarde le terminan robando.

El titular de la División de Seguridad Bancaria, subcomisario Mariano Medel, en diálogo con La Mañana de Neuquén aseguró que “le pedimos a todas las personas que revisen los cajeros antes de ingresar las tarjetas y que no acepten ayuda de ninguna persona ya que esta es la manera en la que actúan estas bandas”.

Fuente: La Mañana de Neuquén