
Enzo Gallia, tres veces legislador provincial por el Partido Justicialista, fue un histórico referente provincial, quien además fue cuatro días gobernador de la provincia cuando Felipe Sapag y sus sucesores en la cadena de mando salieron del país.
Falleció en una clínica privada de la capital neuquina alrededor del mediodía del día 3 de enero, luego de varios días de convalecencia, debido a un paro cardiorrespiratorio.
Sus restos fueron enterrados en el Cementerio Jardín del Recuerdo.
Hijo de italianos y nacido en Arata, un pequeño pueblo pampeano ubicado a 50 kilómetros de General Pico, Gallia llegó a la provincia en 1969, como muchos otros neuquinos por adopción, a trabajar en la obra de El Chocón.
Se afincó en Plottier en 1982, estando casado con Blanca Cahais, con quien tuvo dos hijos.
Desde allí desplegó toda su carrera política, e incluso sembró las bases para lo que después serían las dos gestiones de su hijo, Sergio, hoy diputado provincial.
Enzo Gallia tenía una pasión semioculta: la poesía. “Escribí 60 poemas que en algún momento voy a publicar”, confesó a La Mañana Neuquén, en una entrevista que se publicó años atrás.
“En el año 1972 gané una competencia por el año hernandiano en la que escribí Cartas a José Hernández”, relató. “También me presenté en un certamen de composiciones inéditas en el que publiqué “La leyenda de El Chocón” y obtuve el cuarto lugar”, remarcó.
Sobre su pasión por los libros, Gallia resaltó: “Le hice un poema hasta a los pájaros que cazábamos de chicos en Arata”. El ex diputado fue bibliotecario de los 11 a los 13 años en su pueblo.
Más conocida que su afición por la poesía era su filiación a Racing Club de Avellaneda.
El ex legislador recordó que, de joven, viajó hasta Buenos Aires para ver la final de la Copa Intercontinental que La Academia jugó contra el Celtic de Escocia. “Era el año 1967. Agarré el tren y me fui a ver la final a Avellaneda contó-; me puse detrás del arco donde Racing hizo los dos goles”, narró.
Fuente y Foto, cortesía de La Mañana Neuquén
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