Momentos de tensión y nerviosismo se vivieron el pasado jueves 4 de julio, cuando la Policía llegó con aproximadamente 20 patrulleros a desalojar a un grupo de familias productoras que ocupan una chacra en nuestra ciudad.

Los productores se opusieron al desalojo e incluso algunos de ellos se rociaron con nafta y amenazaron con prenderse fuego si se efectuaba el desalojo.

Ante este panorama, los efectivos tomaron la decisión de retirarse del lugar y la Justicia Neuquina otorgó un plazo de 24 horas, el cual vence en la mañana de viernes 5 de julio.

Las familias ocupan y trabajan esas tierras desde hace 15 años y reiteraron que poseen desde 2011 un certificado de ocupación del predio firmado por una funcionaria del entonces intendente Sergio Gallia. Sin embargo, desde el Ejecutivo advierten que ese papel no tiene peso ante una orden de desalojo.

La orden de desalojo por la causa fue iniciada por Comar Marcos, quien reclamó la restitución de la chacra ocupada, identificada como I1, de más de 20 hectáreas y ubicada en la intersección de la Ruta nacional 22 y la nueva Autovía Norte.

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