Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido

Actualidad

Actualidad

Productores presionan por el matadero de cerdos

El matadero, único desde el cierre del de Plottier, se encuentra en proceso de ampliación desde hace meses. La obra comenzó el 9 de marzo de 2015 y se iba a extender durante 90 días corridos, con un presupuesto que pasó la empresa "Mcon SA" de unos 3.000.0000 pesos. Es decir, se debía terminar en junio.
Sergio Garro
Por Sergio Garro

A Juan Vargas la ira le salta por los ojos. Pasa por momentos de bronca, salta a etapas de impotencia. Tiene una interesante producción porcina, que le costó armar durante diez años, pero no puede faenar. Dos de sus animales están "presos" en el matadero instalado en la meseta, en Colonia Nueva Esperanza que parece abandonada, y él despotrica a los vientos porque nadie hace la tarea del descuartice.

El problema de Juan es el de otros 200 crianceros de ese sector árido y carente, y de tantos otros en Plottier, Senillosa, Centenario. Porque un matadero no da abasto para la producción de animales de la zona, y menos un matadero que "funciona poco, y que cuando lo hace, faena de a cuatro o cinco animales por día", repiten Juan y Sergio, otro de los antiguos productores del sector.

Ese atraso, y "otras cosas", le da pie a los crianceros de Nueva Esperanza para hablar de "miserias políticas" y "especulaciones electorales. Acá los políticos están jugando con nosotros. No inauguran la obra ahora para poder hacerlo cuando estén por llegar las elecciones o, si gana (el intendente) Pechi Quiroga, para hacerlo cuando vuelva a asumir", dicen.

Ellos, al menos con los que pudo dialogar este diario, son muy críticos tanto del gobierno municipal como de la actual gestión del matadero, a cargo de la Asociación de Fomento Rural. De ésta última, porque bajó la cantidad de faenas semanales, "faltan los veterinarios" y el actual titular, Rubén Alegría, "no vive de la producción, si no de otra cosa", despotrican.

¿Qué les pasa con los animales? Básicamente, se les pasa la época del faenado, quedan gordos, se "pasan de grasa" y se vuelven poco rentables. Es genética pura: al animal se lo desteta a los 21 días de nacido y a partir de ahí se lo sigue en una curva de crecimiento. Son buen negocio cuando andan en los 70 u 80 kilos, pero al rondar los 100 comienzan a ser un problema. "Por eso, con un turno por semana para faenar no alcanza", critica Juan. El hombre cuenta con 30 chanchas madres, unos 70 capones y alrededor de medio centenar de lechones. "Para seguir creciendo y que la rueda continúe, necesito faenar unos cuatro capones por semana, detalla.

"El problema es que con un sólo matadero no se puede trabajar. Lo único que logran es que los productores se vayan cayendo económicamente. Deberían existir otras condiciones, porque la realidad es que el negocio es rentable, siempre y cuando se haga en óptimas condiciones".

Manuel Sepúlveda es idóneo en el tema. Es criancero y uno de los pocos carniceros que trabaja sólo cerdo. "Hay productores que hacen las cosas bien, pero les cuesta trabajar. En Senillosa hay algunos que tienen una producción para faenar de hasta 50 capones por semana, pero un sólo matadero que faena tres por día, sólo sirve para un productor", hizo una rápida cuenta. "Quizá lo que se está buscando es que alguien se quede con el monopolio del negocio", soltó.

La ampliación de la cámara, los corrales y la sala de faena fue presupuestada en casi 2,7 millones de pesos, pero los empleados aseguran que "será imposible" faenar 30 animales por hora como se prometió porque "la infraestructura no es la adecuada".

Fuente: diario Río Negro.

Compartinos tu opinión

Te puede interesar

Teclas de acceso