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La economía de la cooperativa, en crisis

Con una deuda millonaria, intentan cumplir un convenio firmado con el EPEN, pero el gobierno los presiona cuando intentan cortar el suministro a organismos públicos que no pagan.

En junio de 2009 se firmó un convenio con el Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN), proveedor de energía de la Cooperativa de Servicios Públicos Plottier, donde refinanciaban una deuda de millones de pesos, descontando deuda de organismos y la cooperativa de agua, quienes por años no pagaron un solo centavo.

“Este convenio tuvimos que firmarlo para poder seguir adelante”, declaró Martín Rodríguez, asesor legal de la cooperativa, quien agregó que la deuda se generó durante la gestión del Consejo de Administración anterior, y desde la firma del convenio con el EPEN la cooperativa refinanció la deuda a un 9 por ciento anual, con una cuota que equivale al 50 por ciento del ingreso en energía.

“Nuestra intención es que, en el transcurso del tiempo podamos absorber en parte el pago de esa cuota con una suba de la tarifa o el crecimiento de más medidores en Plottier”, indicó el asesor.

Por otro lado, Rodríguez comentó que la cooperativa de luz no está exenta de dificultades comunes a todas las cooperativas como son las del financiamiento para realizar nuevas obras e inversiones.

Asimismo el letrado asegura que sin un subsidio no pueden hacer obras, porque no cuentan con recursos y “no podemos ir a pedir un subsidio o un crédito, si no tenemos nuestra deuda refinanciada”, dijo.

Añadió que todo lo que recauda la cooperativa se vuelca a los servicios sociales que se prestan en la ciudad, se pagan las facturas del consumo eléctrico al EPEN y el pago de la cuota de refinanciación de la deuda vieja.

En cuanto a las críticas que apuntan a que la cooperativa le cedió sus grandes usuarios al EPEN afirmaron que esto es falso, ya que simplemente existe un compromiso que cuando se cobran estos grandes clientes, automáticamente se usan para cancelar el convenio firmado.

En contrapartida este convenio no es tan bueno como parece, porque entre los grandes clientes, que se encuentran varios organismos públicos como hospitales y escuelas, no pagan lo que adeudan y tampoco su deuda puede ser transferida para cancelar el convenio.

Para contrarrestar la falta de pago de organismos públicos como el Consejo de Educación o el Hospital, la cooperativa decidió cortarles el servicio, por lo que automáticamente recibieron presiones desde el gobierno provincial para restablecerlo inmediatamente.

Ante esto, Rodríguez afirma que haber firmado algo fue un avance para poder buscar otros créditos, diciendo “nosotros cumplimos con nuestros compromisos”, y paralelamente están buscando la forma para que el EPEN acepte descontar directamente las facturas de los organismos en triangulación con provincia.

Añaden que a pesar de todo han realizado inversiones para mejorar el servicio eléctrico y ya no se corta la energía como antes. “Hace tres años no se podían encender los aires acondicionados, por ejemplo”.

“Nuestro objetivo es que la cooperativa no salga todos los días en el diario porque tiene problemas, la idea es que funcione de la mejor manera posible”, y aseguran que ya no tienen grandes problemas sindicales.

Desde la firma del convenio con el EPEN sostienen que la cooperativa no siguió endeudándose, se mantuvo a flote con los consumos y redujo parte de la deuda vieja, aunque debido a los mayores costos, debe un par de meses.

A esta compleja situación, también hay que sumarle el aumento del costo de la energía que el EPEN aplica regularmente, que en lo que va del año llega al 30 por ciento, y si no aprueba el deliberante un nuevo aumento la cooperativa debería absorberlo.
En este sentido es que la cooperativa está en búsqueda de obtener los subsidios que otras cooperativas han obtenido y aplican en las facturas, como lo ha hecho la Cooperativa Calf de Neuquén o Coopelco de Cutral Co, donde ha conseguido un aporte no reintegrable para cancelar una gran deuda que tenían.

Con respecto a la cantidad de empleados indican que no se ha incrementado el plantel en la misma proporción al crecimiento de usuarios. “En el año 2000 había 68 empleados para 7523 socios, ahora son 79 para 11.272. Yo creo que son insuficientes para el crecimiento que tiene la cooperativa hoy en día”, dijo un consejero.

Aunque se aprecia un fuerte compromiso para mejorar la situación económica de la cooperativa, lo cierto es que de no obtenerse un aumento por parte del concejo deliberante, un subsidio o una refinanciación con el EPEN que acepte tomar las facturas de los organismos, a corto plazo se producirá un grave desfinanciamiento, lo que conllevará a no poder realizar inversiones ni prestar un servicio adecuado.

Autor: Horacio Beascochea

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