El martes 13 de noviembre un grupo reducido de empleados municipales se apostaron en horas de la mañana frente al edificio de la intendencia para llevar adelante el mismo reclamo que protagonizaron hace días atrás: el recorte de los adicionales que percibían.
En esta ocasión, los manifestantes mantuvieron cortada la avenida principal de la localidad, San Martín, a la altura de la plaza, obligado al tránsito a desviarse por calles laterales y además decidieron quemar cubiertas en forma de protesta.
Desde la intendencia explicaron días atrás que debido a la puesta en marcha de un nuevo sistema de manejo de los sueldos y el personal se pudo determinar que unas tres personas cobraban un "plus" que no les correspondía por las funciones que realizaban, beneficio que fue eliminado como parte del programa de ahorro de la comuna, y que llevó la semana pasada a la primera protesta.
Ahora solo resta aguardar como va a continuar esta historia, que al parecer escribirá varios capítulos más.
Fuente: diario Río Negro.