Todas las mañanas, horario en que muchos padres llevan a sus hijos al colegio y otros tantos ingresan a trabajar, transitar por la avenida San Martín se vuelve un disgusto.
Los semáforos ubicados en las intersecciones de la avenida principal suelen detener a los automovilistas en las tres esquinas, por lo que las caras largas se repiten dentro de los autos.
Lejos quedó la época en que circular por el centro permitía disfrutar de la famosa “vuelta al perro”. Hoy la gran cantidad de vehículos que transitan sumados a la desincronización de los semáforos transformaron esas pocas cuadras en un sufrimiento de muchos.
Claudio Silvero, subsecretario de Gestión y Control de la Dirección de Tránsito, explicó ayer que todos los días se realizan controles en los semáforos para verificar que todas las luces sigan funcionando y prevenir que se produzcan accidentes.
El centro cuenta con semáforos en San Martín y Alberdi, Sarmiento y Belgrano. Luego en Perito Moreno y San Martín, Santa Cruz y Zabaleta, Belgrano y Roca, Libertad y Zabaleta y Avenida del Trabajo y San Martín.
Silvero explicó que los semáforos funcionan con lámparas de bajo consumo, por lo que no están a su total rendimiento, y que están pidiendo presupuestos para ver la posibilidad de cambiarlos para que funcionen con luces led.
“Los tres primeros semáforos por San Martín están coordinados para pasar a 35 km por hora, pero el parque automotor de Plottier creció mucho y el vecino que estaba acostumbrado a pasarlos todos en verde hoy ya no lo puede hacer por la cola de autos que se junta”, explicó el funcionario.
En cuanto a la posibilidad de que se instalen más semáforos en la ciudad, Silvero consideró que son necesarios, aunque destacó que la inversión es costosa ya que sólo un módulo de semáforo -que sería la parte de las luces- supera los 15 mil pesos.
Fuente: LM Neuquén.