Los trabajadores nucleados en el SEMP definieron ayer manifestarse por el centro de la ciudad y finalmente permanecer hasta pasado el mediodía frente al municipio. Allí hicieron escuchar sus bombos en reclamo de una urgente convocatoria.
Carlos Ponce, secretario general de ese gremio, indicó que luego de varios días de tener el diálogo cerrado el subsecretario de Gobierno, Francisco Rols, se comunicó con él para informarle que cualquier negociación municipal está atada a lo que el gobernador Jorge Sapag defina a nivel provincial.
“Nosotros estamos esperando que nos convoquen, ya terminaron con el tema electoral y hay muchas cosas para charlar”, expresó Ponce.
En tanto, los empleados enrolados en ATE, quienes fueron los últimos en cobrar, realizarán hoy una nueva asamblea para determinar cómo continúan las medidas de fuerza.
Las oficinas municipales de a poco empezaron a funcionar. La sede de Recaudaciones ayer estuvo colmada de vecinos que esperaban afuera para pagar sus tasas.
Además, luego de casi una semana de inactividad, el Concejo Deliberante abrió nuevamente sus puertas. Los concejales tuvieron la sesión suspendida el jueves pasado y aprobaron una comunicación al Ejecutivo donde le requieren una vez más los balances 2012, 2013 y 2014. Ese pedido lo enviaron también al Tribunal de Cuentas de la Provincia.