“Mientras uno los amenazaba con un arma de fuego tipo revólver, el otro los ató con un cable y los llevó hasta una oficina atrás”, explicó el comisario Henry Leppe.
Al hombre le sacaron la billetera que contenía 1500 pesos y a la joven una llave de la caja de recaudación, en la que había otros 15.000 pesos. Una vez que obtuvieron el botín, dejaron encerrados a los comerciantes y se dieron a la fuga. Cuando pudieron desatarse, el dueño y la empleada dieron aviso a la Policía y constataron qué fue lo que se habían llevado. Al llegar los efectivos, denunciaron el robo total por 16.500 pesos y documentación del comercio.
Además, no pudieron describir a los asaltantes porque tenían los rostros cubiertos ni especificar en qué se movilizaban.
Por su parte, la Policía realizó las pericias en el lugar sin lograr levantar ningún rastro de huellas que permita identificar a los ladrones.
Fuente: LM Neuquén.