El hecho despertó el enojo de los padres, que fueron anoticiados de lo ocurrido por las autoridades del establecimiento cuando retiraron a sus hijos.
“Con un grupo de papás decidimos llamar a la Policía en ese momento, porque el hecho había ocurrido ahí, para que quede asentado, pero a la vicedirectora no le gustó”, relató Viviana Diez, mamá de una de las chicas damnificadas. Agregó que hace cuatro años vienen sucediendo hechos similares, pero que no “va más allá de las paredes de la escuela”.
Viviana radicó el mismo lunes la denuncia en Comisaría 7ma. Además, se presentó en el área de supervisión y allí le dijeron que debían hacer un acta desde el establecimiento, pero cuando acudió a la escuela no estuvo de acuerdo con lo relatado en el acta, por lo que no la firmó.
“Te llaman, te avisan que le roban a tu hija y te vas a tu casa, ¿qué tiene eso de educación?”, se preguntó indignada Viviana y dijo que con una aplicación de Google pudieron advertir que los tres celulares estaban dentro del patio de la escuela.
“Nadie dice nada ni hace nada. Todo queda ahí. En abril le robaron a una docente y el mes pasado a otra. Robaron buzos, plata, celulares, carpetas, tarjetas de crédito y débito”, enumeró la madre, que además lo hizo público por LU5.
Los padres aclararon que en ningún momento intentaron que la Policía revisara a los chicos porque saben, por otro incidente similar, que eso no está permitido, pero que insistieron en una solución y propusieron que se coloquen llaves en las aulas o cámaras.
Fuente: LM Neuquén.