"Siguen dilatando los tiempos, quiero que se descubra qué fue lo que pasó con Mariana. Siento que no les interesa seguir con la causa. A mi hija la mataron y no me interesa el tiempo que haya pasado, acá tiene que haber un responsable", confió Luis Mercado, el padre de Mariana.
Actualmente, pese a la existencia de un informe del licenciado en Criminalística Enrique Prueger detallando distintos indicios que apuntan a una muerte por estrangulamiento, aún no se ha llegado a una formulación de cargos. Entre esos aspectos se encontraba un cable, que fue hallado enrollado sobre la joven y con el que presuntamente se habría ahorcado.
Después de tanto insistir, hace unos cuatro meses se consiguió que se realice en el Instituto Prueger la pericia al cable. "Hicimos pruebas con 50 kilos -peso de Mariana- y el cable casi se corta, mientras que el que se secuestró no tiene nada, ni nudo. Estamos hablando de una estrangulación, no de una colgadura", determinó a LM Neuquén el licenciado Enrique Prueger.
"En la pericia estuvieron los dos peritos de la fiscalía y yo por la querella. Se negaron durante un año a hacer la prueba, una jueza de Garantías dio lugar a que se realice en el Instituto en presencia de ellos y firmaron conmigo, en conjunto, que el cable no tiene nada con relación a lo experimentado. Los cables de las experiencias se rompieron, tenían marcas profundas", aseguró el licenciado.
Además, recordó otros indicios como la "proyección de sangre perpendicular a la pared que no tiene que ver con una colgadura; la víctima tiene lesiones de defensa y existe algo que se llama reflejo vagal, que consiste en que una persona cuando es asfixiada o se ahorca, se orina. Si ella hubiese estado colgada tendría que haber la misma proporción en la parte anterior y en la posterior, en este caso toda la orina está en la parte de la cola, es decir, siempre estuvo recostada". "Es un crimen sin dudas", afirmó Prueger.
Fuente: LM Neuquén.