La aparición de su cadáver generó una enorme conmoción al pueblo neuquino, por lo que, familiares, amigos y vecinos de la víctima de femicidio convocaron a manifestaciones en las calles para pedir "justicia" y para que el hombre detenido por el terrible crimen "tenga una condena ejemplar".
“Quien lo hizo tiene que pagar", es el reclamo permanente de la familia de la joven, quienes en reiteradas ocasiones dijeron haber quedado "destrozados" tras el crimen de “Cielito”, como le decían desde su entorno más cercano.
El único detenido por el caso fue identificado como Alfredo Emilio Escobar, de 28 años, quien cayó dos días después del crimen de López. En ese momento, el esposado fue imputado del delito de "abuso sexual agravado en concurso real con homicidio doblemente calificado".
Tras someterla sexualmente, el femicida de Plottier seccionó el cuerpo de Cielo para luego arrojarla al río Limay, en un sector denominado Los Espigones. Las manchas de sangre de López en la casa de Escobar fueron prueba suficiente para hallarlo culpable, se le dictó prisión preventiva, ahora exigen -como pena única- que el asesino pague con perpetua.