Es que, una jueza de garantías debe decidir si avala la acusación de la parte acusadora y eleva la causa a juicio o hace lugar al pedido del defensor particular y sobresee a los dos guardavidas acusados de homicidio culposo.
El lunes se realizó una audiencia de control de acusación, donde la fiscalía y la querella expusieron la teoría del caso y solicitaron que los dos guardavidas, de apellido Romero y Desimoni, sean juzgados por el delito de homicidio culposo. En este sentido, indicaron que el 3 de febrero de 2019, aproximadamente a las 14, los acusados "en su rol de guardavidas, obraron negligentemente, faltando al correspondiente deber de cuidado e inobservando la reglamentación y deberes a su cargo, lo cual resultó en la muerte por asfixia por sumersión de la niña Celina Olate Villalva de 5 años de edad".
Es que, de acuerdo a la teoría que persigue la fiscal de Homicidios Sandra Ruixo y la querellante Marina Díaz, los dos guardavidas estaban en el sector de ingreso de la pileta, en "una ubicación del sector de piletas errónea y no recomendada para una satisfactoria vigilancia". En este sentido, Díaz destacó que "los dos acusados estaban de espaldas a las piletas, por lo que los dos tuvieron las mismas conductas omisivas"; mientras que el defensor particular sostuvo que la teoría no especifica que tarea desarrolló cada uno de los guardavidas y solicitó que sean sobreseídos.
"Bajo insistencia nuestra la causa está avanzando, pero lo que queremos es que estos chicos realmente acepten la responsabilidad por la negligencia que hicieron. Es por esa negligencia que terminó ocurriendo la muerte de mi nena", destacó Pablo Olate, el papá de Celina en comunicación con LM Neuquén y quien espera que la jueza resuelva que los guardavidas enfrenten un juicio para que "se siente un precedente. Si uno va a una pileta de un club privado, alguien tiene que hacerse responsable de tu cuidado".
Cabe recordar que ese día, Celina había acudido junto a sus padres, un hermano y un primo al predio recreativo de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE.), ubicado en calles Kovalyc y Pavlov de Plottier. "Nosotros no la dejamos que fuera a la pileta, sino que iba a la enfermería a la revisación médica con su primo, porque sabíamos que sin un adulto no podía ingresar. En esos 5 minutos que se nos perdió de vista, suponíamos que estaba en la cola para la revisación médica", recordó el papá.
"Pasaron aproximadamente cinco minutos desde que los menores se retiraron a la enfermería cuando Pablo Olate escuchó gritos provenientes de la pileta. Era su sobrino que le decía gritando que fuera a la pileta. Saltó el cerco perimetral y cuando llegó pudo ver a Celina y a los guardavidas haciéndole reanimación", relata la teoría de la parte acusadora y detalla que fue la persona que estaba a cargo del estacionamiento quien se percató de que había una niña flotando en la pileta, con lo que "los guardavidas no previnieron, no vigilaron ni supervisaron a la menor, quien estaba en una situación de riesgo dentro del sector piletas, en el área de su responsabilidad. No velaron por la seguridad de la niña, no permanecieron en su puesto de vigilancia y prevención al momento de los hechos, como debían hacerlo según la normativa imperante en la materia".
La jueza Carina Álvarez se tomó un cuarto intermedio de 48 horas para deliberar si eleva la causa a juicio o sobresee a los acusados, tal como solicitó la defensa particular. Su decisión será comunicada este miércoles en una audiencia por videoconferencia.
"En 5 minutos nunca giraron la cabeza para mirar a la pileta. Mi nena se murió a 1,5 metros de la silla de guardavidas, pero ellos no estaban en su lugar de trabajo, sino inmediatamente la hubiesen visto en el momento en que se cayó al agua", sentenció Pablo Olate y agregó: "El médico nos dijo que estuvo sumergida no menos de 10 minutos".
Fuente: LM Neuquén.