El viernes 7 de diciembre en horas de la mañana efectivos policiales recibieron las ordenes del juzgado de Instrucción 5 y llevaron a cabo el desalojo del corralón municipal que se encontraba ocupado desde hace una semana.

Pese a la aprobación del Concejo Deliberante de elevar del 15 al 25% los adicionales especiales que perciben los diez trabajadores del servicio de barrido de calles, la toma se mantenía.

La presidenta del Concejo Deliberante, Graciela Suárez (FpV), declaró que "nos llama la atención que no se hayan ido del corralón a pesar de que aprobamos por unanimidad lo que pedían". Y detalló que "esta gente tenía un plus por su trabajo de 15% y unos adicionales, nosotros lo que hicimos fue fijar que el plus de ese sector es de 25% para que no haya discusión sobre lo que deben cobrar".

En cuanto al desalojo, informaron que dos mujeres intentaron impedir que se usen los camiones recolectores de residuos y fueron demoradas. "Se trata de la dirigente de ATE, Pilar Sagredo, y de Juana Navarrete", afirmó una fuente policial.

"Esta gente primero quemó cubiertas en la intendencia y ahora habían paralizado los servicios públicos, por eso la justicia actuó", analizó el asesor de la comuna, Marcelo Barberis.