En una presentación realizada ante el Municipio, la entidad pidió que se realice un informe que dé cuenta del estado bacteriológico y químico de los efluentes vertidos al río y que se confirme el tiempo estimado que demandará la reparación de la planta.

Alicia Ferrari, presidenta de Rincón Limay, comentó que hay informes que aseguran el “mal” funcionamiento, pero que igualmente están gestionando ante la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) nuevos análisis que confirmen la situación para que la comuna actúe con “urgencia”.

“No es que nosotros queremos que se hagan multas a la Municipalidad, sino que buscamos que se arregle lo más rápido posible, porque estamos hablando de nuestro río y del agua que luego tomamos”, expresó Ferrari.

Rebeca Martínez, integrante de la asociación, agregó que en muchas calles de la ciudad “se ven efluentes cloacales”. “Por ejemplo en la esquina del CPEM 8 sale el líquido al pavimento”, dijo.

“Hay que bombear el líquido hasta la planta pero, como las bombas están rotas, entonces no tiran y rebalsan”, describió Martínez.

Las ambientalistas se mostraron preocupadas por la situación. “Muchos vecinos piensan total no nos perjudica porque el agua pasa, pero, en realidad, se contamina todo el río”, expresaron.
Por su parte, desde el gremio ATE aseguraron que el informe de los empleados de la planta asegura que “los equipos no funcionan, por lo que si bien el agua sube hasta la planta vuelve al río sin tratamiento”.

Fuente: LM Neuquén.