La oficina que funciona en un negocio de repuestos sobre la calle Santa Fe Sur, en diagonal al sector conocido como el Triángulo, abre solo de mañana, de 9 a 12, y permite el ingreso de a una persona, por lo que la cola llega hasta la esquina.

Adultos y jóvenes esperan sobre la vereda donde casualmente no hay ningún árbol para abonar sus facturas de teléfono fijo, telefonía móvil, tarjetas de crédito, cable u otros servicios.
Si bien en algunas cajas de la sucursal local de La Anónima se pueden hacer pagos, es solamente de los que cuenta con la factura, porque el sistema no les permite incluir datos.

Marcelo Inostrosa, vecino del barrio Alas Argentinas, consideró que “está todo mal” en Plottier y aseguró que todos los meses se pierde una mañana en el Pago Fácil. “Yo soy jubilado, pero hay personas que tienen que ir a trabajar, o mujeres que vienen con nenes, es una vergüenza”, consideró.

Hasta el año pasado funcionaba una oficina de Rapipago en la calle Roca, pero según los vecinos los reiterados robos colaboraron para que cerrara sus puertas.

“La solución que tiene que haber es que se abra una casa central de estas empresas con varias cajas, como en Neuquén. Cada vez somos más los que vivimos en Plottier, y es una necesidad”, expresó Marcela, del barrio Tagliaferri. Atrás estaba Mariana, del barrio San Miguel, quien explicó que hace la cola porque tiene que pagar el plan del auto y que solo lo puede hacer en este lugar.

Otro de los problemas con que se enfrentan los vecinos es cuando el sistema presenta inconvenientes. “Quizás estás una hora esperando y te avisan que se cayó el sistema. Como está abierto tres horas, más vale irse y volver al otro día, pero los intereses te corren”, aseguró Marta, quien aguardaba para pagar Movistar, ya que no le envían la factura a su casa.

Fuente: LM Neuquén.