El establecimiento se encuentra en la intersección de la Avenida San Martín y Martellota, y además se incautó mercadería fraccionado, como snacks y pan del que no conocían su procedencia. Al ser los dueños reincidentes en este tipo de casos, se decidió una clausura de 10 días.

Personal de Bromatología de la Muni fue clave a la hora de la decisión al constatar que la carne estaba a 19 grados, cuando habitualmente debe mantenerse a 8 o menos.

"También, se pudo observar la falta de higiene y salubridad del lugar", informaron las autoridades locales en un comunicado publicado tras la clausura.

"En el operativo se observó que las heladeras estaban desenchufadas y se procedió al decomiso de carne (alrededor de 100 Kg) en mal estado", agregaron las autoridades.

Ante la queja de un vecino que percibió mal olor en la mercadería que había comprado, el carnicero (quien tiene la concesión de la carnicería), alertado de este tipo de maniobras por parte de los propietarios del comercio, realizó una denuncia ante la policía. Al presentarse los efectivos y personal de control de la Municipalidad, y constatar las condiciones insalubres en el local, se desató una fuerte discusión entre los involucrados.