El pasado 20 de julio alrededor de las 9.30 horas de la mañana efectivos de la Brigada de Explosivos y Bomberos montaron un operativo en pleno centro de la ciudad tras el aviso de una posible bomba.

Personal de la Comisaría sexta recibió el llamado de un vecino que informó que observó a una persona dejando rápidamente un objeto en las afueras de la capilla San Antonio de Padua, ubicada en la calle Chos Malal al 150.

Ante la sospecha de un posible artefacto explosivo, la policía cortó la calle Chos Malal entre el 100 y el 200, en pleno centro de Plottier. Luego se llevó a cabo la detonación del objeto, donde se pudo constatar que no contenía nada en su interior.

La posible bomba, era una caja de color naranja. Según trascendió, Caritas había tirado a la basura varias de esas cajas; por lo que se presume que alguien quiso devolverla.

La falsa alarma de bomba mantuvo en vilo a la población de Plottier, dados los antecedentes de bomba que hubo en la región. Uno que se suscitó hace unos días en Cipolletti, que terminó con la vida de una persona; otros en el centro de Neuquén, registrado el las afueras de una conocida empresa de aviones y una mutual de un sindicato.

El operativo policial culminó alrededor de las 11 de la mañana cuando se comprobó que la caja no contenía nada en su interior.